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Desde la sede de Catamarca promovemos la transformación digital de la industria olivícola regional para mejorar su desempeño e incorporar un modo de gestión basado en datos obtenidos en tiempo real.
Bajo la premisa de reducir costos y pérdidas durante la cosecha del olivo, Roberto Gildeza y Carlos Serafini del Departamento Monitoreo y Control de Procesos Industriales NOA, desarrollaron un sistema informatizado de generación, transmisión y almacenamiento de datos en la nube en tiempo real que presentaron recientemente a la comunidad intiana en el marco de las TecnoINTI 2022.
“El proyecto consiste en la aplicación de tecnologías de industria 4.0 para recabar información de pesaje que le permite al productor realizar un seguimiento preciso de las tareas de cosecha y transporte de la fruta, comparando estos datos propios con aquellos generados por la planta receptora donde se elabora aceite”, relata Roberto Gildeza desde la sede de Catamarca.
“El sistema de cosecha asistida se va a aplicar simultáneamente con el servicio convencional mecanizado que ofrece la empresa Copello, la cual recurrió a nosotros tras detectar que los productores olivícolas de la región sufren pérdidas evitables de su cosecha en las etapas de transporte y entrega a la planta de molienda”, explica.
“En la cosecha mecánica, la fruta es trasladada por terceros y luego recibida, pesada y registrada utilizando básculas o balanzas ajenas al control del propietario, que no siempre están bien calibradas o verificadas”, comenta Carlos Serafini.
Roberto Gildeza y Carlos Serafini de la sede de Catamarca acompañan a una empresa local en el recorrido hacia la mejora del desempeño productivo de la industria olivícola regional con la aplicación de tecnologías digitales.
En este sentido, Carlos precisa que con este innovador servicio se busca subsanar diferentes instancias en el proceso productivo como pérdidas y/o desvíos de carga, transporte, pesajes, prever turno de molienda evitando la degradación de la fruta y estimar la magnitud de aceite de oliva a obtener.
“Además, con la información generada y la acumulada históricamente, el sector olivícola va a estar en condiciones de realizar análisis prospectivos para mejorar el manejo de los cultivos, tomar decisiones precisas sobre fertilización, irrigación, sanidad, poda y generación de biomasa a fin de mejorar de manera incremental el rendimiento de su finca de cara a las próximas cosechas”, remarca Roberto.
¿Cómo se obtienen los datos de la cosecha en tiempo real?
Celdas de carga, data logger, GPS y chip celular
Mediante el sistema desarrollado por los expertos del NOA, la fruta es pesada al momento de ser cosechada por medio de balanzas electrónicas, cuyas celdas de carga están colocadas intercaladas entre los elementos de la suspensión de cada carro.
Cada balanza está conectada a una data logger, a un kit GPS y a un chip telefónico para la transmisión de datos en tiempo real a la nube. El sistema no reemplaza la generación de datos de pesaje en la planta de recepción, sino que compara y concilia los datos obtenidos, reduciendo margen para el error o su manipulación.
Roberto señala que el servicio, que se presta con tres cosechadoras y tres carros, se orienta a las economías regionales del olivo, la nuez y el limón, que aplican idéntica tecnología de cosecha mecánica
Advierte que “la transformación digital no aumentará las magnitudes cosechadas, pero sí agregará valor en términos de trazabilidad, que minimiza pérdidas y desvíos y suma variables de control para la gestión actual y posterior del establecimiento agrícola”.
Carlos destaca que la gestión digital de datos georreferenciados transforma y potencia el impacto de la información en el paradigma de manejo agronómico de las explotaciones agrícolas. “Permitirá al propietario mapear sus cultivos y tomar decisiones muy precisas sobre el riego, fertilización, poda, cosecha en cada sector o parcela del campo”, comenta.
Además, desde el punto de vista ambiental, comentan que la implementación del proyecto contribuye a mejorar la comprensión, cálculo y planificación del retiro de la biomasa de los residuos de la cosecha para prevenir incendios espontáneos en los campos. También se podrá estimar cantidad y localización de biomasa por sector, pudiendo prever y generar posibles proyectos de economía circular de biomasa o biogás.
Mediante este desarrollo de la sede de Catamarca del instituto, la empresa Copello será la primera y única en la región en prestar el servicio mecánico de cosecha con generación y transferencia digital de datos de rendimiento.
Pablo Cid y Carmen Canteros