A mediados de marzo el país entró en cuarentena: los proyectos, programas y desafíos que se tenían planeados para este año, viraban a un nuevo escenario donde una pandemia sorprendía a todos.
Desde ese momento, hubo que generar nuevas alternativas de formación, teniendo como principal objetivo cubrir la necesidad de capacitación de todos los sectores con actividades programadas y otras nuevas demandas que aumentaron no sólo en INTI, sino en todas las áreas públicas.
El Estado ha sido un gran facilitador en los procesos de formación de los empleados públicos, brindando cursos a través del Instituto Nacional de la Administración Pública (INAP). A partir de la nueva coyuntura, el INAP reacondicionó las capacitaciones que normalmente dicta de forma presencial y las desarrolló bajo la modalidad virtual, llegando así a todos los agentes estatales y creando un abanico de oferta aún más grande y disponible de la habitual.
Cabe destacar que alrededor de 220 agentes del INTI solicitaron estas capacitaciones y más de la mitad lograron realizarlas, teniendo en cuenta siempre la implicancia y el perfil de cada uno de acuerdo a sus tareas. Por otra parte, también se mantuvo activa la capacitación en género, logrando un alcance de 120 agentes capacitados durante este periodo.
En tal sentido, y acompañando este proceso de adaptación y reorganización, el Departamento de Capacitación y Formación del INTI, facilitó y arbitró los medios disponibles para brindar capacitaciones internas programadas para todos los agentes del Instituto.
La virtualidad en procesos de formación tiene sus beneficios, pero también sus limitaciones. Para nombrar sólo alguna, carece de una virtud que hoy con el aislamiento social extrañamos y es el intercambio presencial con colegas, donde se potencian proyectos y programas, con un café de por medio, en el marco del intercambio de ideas y explicaciones dentro de un aula real, entre docentes y participantes.
Entre los beneficios, la llegada a muchos más agentes, especialmente del interior del país, favoreció la participación en cursos y seminarios, que de otra forma no hubieran podido acceder. Pero también fue necesaria la adaptación de todos y todas. Además de la colaboración de colegas docentes, de áreas que adaptaron sus ofertas a las necesidades de contexto y especialmente el trabajo de todo el equipo del área de capacitación para comprometerse con la implementación de acciones de formación de calidad. El objetivo estuvo y está presente en favorecer y acercar a todos los trabajadores para que encuentren un espacio de formación y puedan continuar capacitándose.
En este sentido, además de acciones con entes gubernamentales externos con los que mantenemos el compromiso de formación iniciado en 2019 -como capacitar a docentes y alumnos de escuelas técnicas junto a Tecnologías de Gestión-, se continuó con la firma de convenios de pasantías con universidades y escuelas, se reforzó el acompañamiento y seguimiento de becarios del INTI, muchos de ellos recién ingresados, y se orientaron variados cursos internos, tomando en cuenta la actualización de los temas donde impacta el COVID 19, el teletrabajo y la cuarentena, entre otras muchas acciones.
Asimismo, fueron aprobadas 90 solicitudes de capacitación externa desde el inicio de la cuarentena con el fin de impulsar la formación y crecimiento profesional y técnico del personal del organismo. Las temáticas solicitadas por los agentes, se orientaron exclusivamente a la experticia de cada uno.
No fue menor el impulso de las capacitaciones internas brindadas, iniciando cursos virtuales a través de la herramienta Microsoft Teams, teniendo en cuenta que todos los agentes tendrían acceso a ella. En primer lugar, se comenzó con una actividad de formación orientada a la actualización del derecho ambiental durante la emergencia sanitaria; se continuó con cursos en calidad, metrología, estadística y normativa, brindada por expertos del organismo, y se trabajó en la actualización de la seguridad e higiene a través de ART para todo el personal. Hacia finales de junio se capacitaron internamente más de 300 agentes de todo el INTI.
La pandemia trajo consigo un gran desafío, la adaptación a este nuevo escenario de todos los sectores y de cada uno de los agentes del organismo demostró que los resultados siguen siendo favorables y expresan el trabajo, dedicación y adaptabilidad que se logró a fin de fortalecer la capacitación y formación del personal de INTI. Gracias a todos y todas las que junto al Departamento de Capacitación y Formación vienen facilitando esta tarea en tiempos tan complejos.
