El INTI asiste al Estado boliviano para la puesta en marcha de centros de innovación productiva en lácteos, textiles, cueros y maderas.
En el marco de la última actividad del Proyecto “Fortalecimiento tecnológico para la mejora de la productividad de la cadena láctea”, el INTI recibió a la delegación del PRO Bolivia, institución dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural de dicho país.
Se trata de la octava misión técnica de dicho proyecto, en el marco de un proceso de cooperación técnica iniciado en 2011 y por medio del cual el INTI asiste a Pro Bolivia en su objetivo fundamental de transformar la matriz productiva del país. La creación de Centros de Innovación Productiva (CIPs) en sectores prioritarios como alimentos, maderas, cueros, textiles y metalmecánica tiene como uno de los referentes regionales al INTI que, a través del Fondo Argentino de Cooperación Sur Sur y Triangular (FOAR), dependiente de la Cancillería Argentina, apuntala la industria boliviana.
El vicepresidente del Instituto, Hugo Monté, el responsable de INTI-Lácteos Sede PTM, Marcelo González, y el responsable del proyecto por parte de la Gerencia de Cooperación Económica e Internacional del INTI, Ezequiel González Simkin, recibieron al director ejecutivo de Pro Bolivia, Javier Escalante, y a la coordinadora del Fondo Pro Leche , Martha Ameller; programa creado para incentivar e incrementar el consumo de productos lácteos en el país sudamericano con el fin de elevar los niveles nutricionales de su población.
Monté destacó la importancia de la cooperación técnica entre ambos organismos en la que el INTI impulsa la implementación de tecnologías adecuadas al grado de desarrollo industrial boliviano que recorre un camino de crecimiento sostenido. En tal sentido, destacó la utilidad para el país vecino de implementar tecnologías desarrolladas por el INTI como sistemas de faenas móviles para ganado menor y plantas lácteas, también móviles, que permiten pasteurizar 2 mil litros de leche diarios.
“El desarrollo de los centros tecnológicos del INTI y su experiencia acumulada nos va a permitir avanzar en la implementación de nuestros propios centros tecnológicos. Como Estado hemos priorizado cinco complejos productivos para desplegar nuestra industria”, señaló el director de Pro Bolivia. “Apuntamos a ser un puente entre la ciencia y el productor y promover el acceso a la tecnología para generar nuevas capacidades productivas en nuestro país, agregó”.
La visita de los funcionarios bolivianos se enmarca en la última etapa del proyecto financiado por el FOAR, a partir del cual se apunta a contribuir en la creación de un centro lácteo en dicho país. Ameller explicó que por medio de esta iniciativa “buscamos contribuir a la seguridad alimentaria con soberanía, facilitando el acceso de las bolivianas y bolivianos a los productos lácteos, a la vez que fomentar el desarrollo industrial del complejo productivo lácteo”.
“El intercambio con el INTI nos permitió avanzar en el fortalecimiento de toda la cadena agroalimentaria. Pudimos intercambiar criterios y recibir asistencia técnica para el fortalecimiento de nuestras cadenas de valor y adquirir experiencia para la implementación de un centro de innovación lácteo que estará funcionando en 2018”, comentó la coordinadora del Fondo Pro Leche, programa que logró duplicar el consumo de lácteos en la población desde su creación en 2012.
El Centro INTI-Lácteos comenzó a brindar asistencia a Pro Bolivia en 2014 a través del proyecto en torno a tres ejes: fortalecimiento de la infraestructura analítica, capacitación en tecnologías de elaboración productos (quesos y yogures) y análisis sensorial; y asesoramiento para la puesta en marcha del centro lácteo en Bolivia. El tratamiento de efluentes y aprovechamiento del suero de quesería también formó parte de los temas abordados en las misiones técnicas.
“Los resultados que obtuvimos producto de esta articulación fueron muy positivos. Para la creación del centro lácteo vamos a brindar asistencia en gestión, equipamiento y capacitación del personal.”, señaló Marcelo González. “Fundamentalmente apuntamos a trabajar en la inocuidad y la seguridad alimentaria por medio de la transferencia tecnológica con la intención de que las capacidades queden instaladas en el país y puedan ser replicadas en otras regiones”, agregó.
El responsable de INTI-Lácteos PTM explicó que si bien el consumo de leche per cápita anual en Bolivia es relativamente bajo (60 litros por habitante contra 200 en Argentina), Pro Leche lo ha podido incrementar, a la vez que formar a productores en la mejora de la tecnología que aplican, en procesos y análisis que permitan implementar el pago de leche por calidad.
Los funcionarios bolivianos también visitaron los centros de Textiles, Agroalimentos, Madera y Muebles, y Cueros, además de la sede de INTI Lácteos en la ciudad de Rafaela, Santa Fe, donde tuvieron oportunidad de visitar pymes lácteas que trabajan con el Instituto.
“Realizamos ocho misiones técnicas en estos dos años y esta es la misión final. Hemos colaborado en la realización del primer concurso de quesos en Bolivia del que el INTI fue jurado; también realizamos cursos de elaboración de quesos y yogures a escala industrial y artesanal. El INTI va a dejar un documento guía para la puesta en marcha del centro lácteo en Bolivia y seguirá apoyando y colaborando con el Estado boliviano en el proceso de puesta a punto de sus centros de maderas, textiles y cueros. Eso implica acreditar laboratorios, capacitación del personal y todo el proceso de desarrollo que le permita ofrecer servicios a la industria”, comentó Ezequiel González Simkin.
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